domingo, 15 de septiembre de 2013

Yo te respondo pero déjame una pregunta ¿Vale?

El término vacaciones es sinónimo de libertad. Frente a la obligación del trabajo, frente al castigo bíblico de tener que ganarnos el pan con el sudor de la frente, las vacaciones significan la liberación; eso sí, es una liberación momentánea y tanto el sistema productivo como el conjunto del sistema de convivencia saben que es necesario para que los individuos podamos recuperar fuerzas y continuar. Expresiones muy repetidas cuando se habla de las vacaciones son: «Necesito desconectar», «Tengo que recargar las pilas»; ambos comentarios son absolutamente reveladores: el trabajo y la actividad cotidiana agotan y, por tanto, es necesario, recobrar la energía para volver a iniciar la marcha.

No hay comentarios:

Publicar un comentario